Esta es la interesante historia del proceso de reproducción gráfica que conocemos como semitonos.
La mayoría de quienes los utilizamos no conocemos el origen de esta técnica y la damos por sentada a partir de que está implementada en todos los programas profesionales edición y diseño de imágenes.
Uno de los objetivos siempre perseguidos durante la historia de los métodos de reproducción gráfica ha sido el de conseguir la máxima relación entre calidad y costo.
Desde el año 1370 ya se utilizaba la técnica de impresión a partir de grabados para producir impresiones con variaciones de tono, que se conseguían creando líneas o puntos de forma manual en planchas de cobre o madera que luego eran entintadas y presionadas contra el papel.
Estos grabados eran realizados por artistas muy hábiles. Junto con la impresión, resultaba un proceso laborioso, lento y caro.
Habría que esperar hasta 1873 para ver la primera impresión fotográfica conseguida por un sistema óptico que emulaba variaciones tonales y matices mediante puntos, lo que supuso una revolución en el mundo de la impresión fotográfica luego de que en 1877 se implementaran en la impresión de periódicos.
El principio de la creación de imágenes de semitonos, que es el término que define a esta técnica, es la de aprovechar las características de la visión humana para crear una ilusión óptica en la que la disposición, forma y el tamaño de los puntos consiguen que veamos tonos continuos a partir de 30 cm de distancia.
Tono continuo y su emulación con semitonos |
Para crear estos puntos en la era anterior a la electrónica y la digital, se utilizaron métodos fotográficos.
Cámara de copiado |
Concepto técnico |
Se utilizaban pantallas con un tramado lineal interior embutido en cristal por el que pasaba la luz a través de los huecos transparentes.
Panfleto publicitario de pantallas para generar semitonos y vista de sección de una pantalla con dos cristales dispuestos uno sobre el otro, cada uno con lineas grabadas con ángulo contrario para formar un tramado cruzado que generaría semitonos a 45° (o 135° según se mire)
Para generar puntos de distintas formas, que le conferían al semitono características distintas de contraste, definición o precisión en la reproducción de color en la impresión final, se utilizaban placas que se colocaban en la apertura en el conjunto óptico de la cámara.